Este fin de semana Norma Luis, una abuela platense de 81 años, pudo concretar uno de los más grandes deseos que tenía pendiente en su vida: saltar en paracaídas. “Es indescriptible, me sentí dueña del mundo y pequeñita a la vez”, aseguró la mujer.
La idea de este loco deseo comenzó cuando Norma era pequeña, tal es así que no recuerda precisamente a que edad se le ocurrió hacer este plan. En diálogo con 0221.com.ar, la abuela dijo: “Son esas cosas que un día me desperté o vi en una película y empecé a pensar qué sensación se sentiría”.
Luego, la jubilada aseguró que es imposible de describir lo que sintió al estar en el aire. Lo único que pudo manifestar es que “es un cúmulo de sensaciones que no se pueden explicar, que no se pueden creer”.
Después de varios obstáculos, la abuela de 81 años pudo tirarse en paracaídas
Norma es madre de cinco hijos, tiene 12 nietos, seis bisnietos y su historia para concretar su sueño es bastante particular, ya que tuvo que pasar una serie de obstáculos. En 2020 estuvo muy cerca de ir a volar, pero la pandemia y el casamiento de una de sus nietas le impidieron hacerlo.
Fue entonces que cuatro de sus nietos y una de sus hijas comenzaron a averiguar para cumplirle el deseo a Norma con el motivo de festejo de sus 81 años. Finalmente, la familia eligió Chascomús para que la abuela se tire en paracaídas la semana pasada, pero por la lluvia tuvieron que volver a postergarlo.
Este fin de semana, la platense viajó con su familia hasta la localidad bonaerense pero cuando llegaron les avisaron que una avioneta no podía despegar por turbulencias. En ese momento Norma pensó que su sueño estaba arruinado una vez más.
De todas formas, la jubilada esperó el tiempo necesario hasta que las condiciones climáticas estén aptas para que ella vuele por los aires. Después de unas horas, desde el aeropuerto informaron que el avión ya podía despegar.
En primer lugar, los paracaidistas le explicaron a la mujer de 81 años cómo iban a proceder para saltar, luego subieron a la aeronave, Norma se dejó llevar por sus sentimientos y con el viento en la cara vivió la emoción a flor de piel.
En una entrevista con TN, la abuela contó su experiencia después de cumplir su mayor sueño: “Fue maravilloso, duró unos minutos la caída, pero lo disfrute tanto que me pareció una enormidad. No sé si lo voy a repetir”. Al ser consultada sobre su familia, Norma dijo que fueron unos cuantos pero solo a acompañarla y a mirar desde abajo. “Algunos hicieron videos, pero ninguno saltó conmigo. La única loca soy yo”, concluyó entre risas.