Un hombre de 55 años, que estaba desaparecido desde 17 de noviembre pasado en Jujuy, fue encontrado con vida en la ciudad de Villazón, en el sur de Bolivia y limítrofe con La Quiaca, tras una amplia investigación policial. Se trata de Sixto Balcarse, que se desempeña desde hace 27 años como jefe del Registro Civil de la localidad jujeña de Caspalá, poblado del departamento Valle Grande, fue localizado por personal de la Brigada de Investigaciones en buen estado de salud, informó la fuerza de seguridad.
Los familiares de Balcarse habían perdido contacto con él cuando salió de su casa en Caspalá para viajar a San Salvador de Jujuy a realizarse unos estudios médicos, para lo cual debía trasladarse a Humahuaca y desde allí a la capital provincial.
En esa ciudad quebradeña es donde el hombre había sido visto por última vez, registrado por una cámara de seguridad de la Terminal de Ómnibus cuando se acercó a una ventanilla para preguntar el precio de un boleto hacia La Quiaca, lo que generó más incógnitas sobre su paradero.
Tras la denuncia policial radicada ese mismo día por la familia, se activó el protocolo y se dio intervención a la División de Búsqueda de Personas y a la Dirección de Investigaciones de Jujuy.
Los familiares lo habían buscado en hospitales y clínicas de San Salvador de Jujuy sin obtener novedades, e incluso, a once días sin rastros de su paradero, habían reclamado a las autoridades provinciales que aceleraran la búsqueda con rastrillajes intensivos hasta La Quiaca.
La búsqueda se realizó primero con ayuda de canes por senderos y caminos de Humahuaca, y luego se extendió hacia otras localidades.
Hace unos días, una comitiva policial de la capital provincial junto con el personal de la Brigada de Investigaciones de La Quiaca se trasladaron hacia Villazón y articularon tareas de búsqueda junto con fuerzas especiales del lugar, lo que finalmente dio resultado positivo.
No trascendió los motivos por los que Balcarse pasó a Bolivia, como tampoco se dio a conocer las circunstancias en que fue hallado.
Una vez que las fuerzas de seguridad tuvieron la certeza de haber dado con el paradero del funcionario caspaleño, coordinaron con su familia para que pudiesen reencontrarse en la ciudad boliviana. De esa manera, cuatro hijos del hombre se trasladaron hasta Villazón, donde conducidos por los investigadores hicieron contacto en la plaza central de la ciudad.
Su familia había ofrecido una recompensa de 100.000 pesos para quien aportara información certera que ayude a dar con el paradero del funcionario.
Con información de Télam
