Parado sobre la afirmación de que Juntos por el Cambio es “una fuerza política de diálogo”, el gobernador jujeño Gerardo Morales sostuvo por el contrario que el Frente de Todos, y por extensión el Gobierno nacional, se convirtió en un puñado de “facciones que luchan entre sí por una cuota de poder”, lo cual lo llevó a sentenciar que entonces “ése es el problema del país”.
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El líder radical estuvo en la provincia de Entre Ríos, donde junto al diputado nacional Mario Negri y otros referentes nacionales de la UCR y el PRO acompañó la presentación de candidatos a diputados nacionales de Juntos por Entre Ríos.
En el marco de esa visita Morales participó también de un acto de campaña en la ciudad de Crespo -73 km al sur de la capital Paraná-, donde invitado a hablar ante la concurrencia definió al Gobierno nacional como “un frente de facciones” que están “todas peleadas entre sí y ni se hablan”, y así es como, a su juicio, “no da señales de tener un rumbo”.
NAVIDAD EN NOVIEMBRE
El mitin proselitista estuvo encabezado por los candidatos a diputados nacionales de Juntos por Entre Ríos Rogelio Frigerio, Marcela Antola y Atilio Benedetti, y entre las presencias destacadas estuvo el gobernador Morales junto al diputado nacional Mario Negri y el presidente del Comité Provincia Entre Ríos de la UCR, Jorge Monge.
Durante su intervención, el jujeño fue enfático al comparar al Frente de Todos con “esa familia que tiene a todos sus miembros peleados y no se pueden ni hablar, pero ahora se tienen que juntar para Navidad y después siguen todos peleados”.
“Para el Frente de Todos, Navidad es el 14 de noviembre”, ironizó.
Anteriormente, en un encuentro de los dirigentes con medios entrerrianos, Morales convocó a los argentinos a “salir de la grieta”, en lo que puso como ejemplo la experiencia de Jujuy, donde “logramos un acuerdo con un importante sector del peronismo, socialismo, GEN y una variedad de fuerzas políticas”, describió, y tras alentar a “institucionalizar más Juntos por el Cambio”, aseguró que “somos una fuerza política de diálogo, especialmente en el Congreso. Pero el problema es el Gobierno, que no tiene un plan y tiene un frente interno de pelea constante”, de manera que “ése es el problema del país”, insistió.
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En cuanto al presente de la coalición Juntos por el Cambio, analizó que atraviesa una “hermosa transición, aprendiendo de lo que hicimos bien y mal”, con la posibilidad de que “haya otra alternativa en 2023″, y precisamente por eso alentó que “hasta tanto, hay que trabajar con responsabilidad, mostrando a la gente lo que queremos hacer”, subrayó.