La diputada nacional del oficialismo, Gisela Marziotta, presentó esta tarde un proyecto de ley para declarar la intervención de los tres poderes de Jujuy “en resguardo de la vida, integridad y libertad de las personas humanas y restablecer de la Constitución Nacional”.
La diputada del bloque del Frente de Todos (ahora Unión por la Patria) invoca “la situación de conmoción interior” generada por la reforma de la constitución local impulsada por el gobernador Gerardo Morales.
El proyecto de cinco artículos fija el plazo de la intervención en 180 días, “prorrogables por el Poder Ejecutivo nacional por un período igual”.
El diputado nacional de la Unión Cívica Radical, Mario Negri, en referencia al proyecto de Marziotta dijo que “la escalada del kirchnerismo contra Jujuy no para, pese a las palabras del Presidente en cadena nacional”.
“Una diputada de su riñón político presentó un proyecto de ley que establece la intervención federal de la Provincia de Jujuy. Una barbaridad inaceptable que rechazaremos”, criticó Negri.
El proyecto de Marziotta se conoció poco después de que el presidente Alberto Fernández diera un mensaje en la Casa Rosada sobre la crisis social que vive Jujuy.
En su mensaje, el presidente Fernández no habló de la posibilidad de intervenir los tres poderes del gobierno de Jujuy, pero sí dijo que instruyó al ministerio de Justicia de la Nación “para que analice y eventualmente promueva las acciones de inconstitucionalidad de los artículos de la Constitución votada en Jujuy que violan la Constitución Nacional y los tratados internacionales”.
Alberto Fernández también le solicitó “al gobierno de Jujuy que convoque a las comunidades indígenas y a todos los actores sociales a encontrar los canales de diálogo para solucionar el conflicto que ha provocado con acciones antidemocráticas” y dijo: “Quiero que sepa el señor gobernador que para ello cuenta conmigo y con el apoyo del Gobierno nacional”.
En su mensaje también criticó al gobernador Morales: “A 40 años del retorno de la democracia es inadmisible que la violencia estatal sea la respuesta de un gobierno a los reclamos legítimos y a las expresiones de sus comunidades”. Y le pidió a Morales “que no utilice al pueblo jujeño como el banco de pruebas de la represión y el saqueo que determinados sectores sociales quieren llevar adelante”.
