Aunque el tema del día era el debate por la ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, este miércoles en el Senado de la Nación también hubo espacio para una cuestión de la política doméstica: el senador Guillermo Snopek denunció que el gobernador Gerardo Morales lo llamó por teléfono -en fecha que no precisó- para propinarle una fuerte amenaza en términos de "si me metía con su mujer, lo habilitaba a él a meterse con mi familia", tal como relató visiblemente nervioso y acalorado al hacer uso de la palabra desde su banca.
Lo que parece ser una disputa familiar enardecida por la política -en razón de que la actual pareja y futura esposa de Morales es hermana del propio senador Snopek-, implica una "imputación penal con respecto al aborto, o el pretendido aborto, con mi hija mayor", dijo el parlamentario, "y eso es lo que vengo a plantear, y que está en torno y ceñido a esta ley", el proyecto que se debatía entonces.
Pero también denunció Snopek que "el uso del sistema judicial para uso privado o para uso político en mi provincia deja en evidencia que por primera vez en democracia el estado de derecho en Jujuy, no existe", sentenció.
Enterada de esto, la diputada nacional Alejandra Martínez reaccionó y dijo que Snopek "se sumó a la campaña mediática de Milagro Sala, que hace ya dos años y medio plantea una supuesta afectación del Estado de Derecho en Jujuy sin ninguna clase de prueba o fundamento, una campaña -sostuvo- que busca desprestigiar a la Justicia por meter presos a los delincuentes".
Interpretó asimismo la legisladora radical que Snopek sólo busca "atacar al Gobernador" y para ello eligió criticar las reformas aplicadas en el Poder Judicial de Jujuy "tendientes en todos los casos a combatir la corrupción", por lo que avisó: "Es cierto que algo cambió en nuestra provincia, Senador: se acabó la impunidad de los ladrones y los violentos. ¿Eso lo pone nervioso?", interrogó.
De las amenazas denunciadas, Martínez dijo que el legislador justicialista "no ofreció ninguna clase de evidencia para sustentar esta acusación, apelando en cambio a una victimización demagógica e interesada", y le reprochó haber puesto "en entredicho la institucionalidad de toda la provincia para exponer sus conflictos personales, como si el Senado fuera un juzgado de Familia", cuadro que calificó como "una actitud cobarde y políticamente nefasta", expresó la diputada de Cambiemos.