Frente a las dificultades que atraviesa el sector por la pandemia de coronavirus, trabajadores del transporte turístico se movilizaron por las calles de San Salvador de Jujuy para reclamar al Gobierno provincial el otorgamiento de subsidios que les permitan afrontar sus obligaciones mensuales.
Una caravana de combis -cerca de cuarenta vehículos- recorrió el casco céntrico, en el marco de la "marcha federal para reclamar la emergencia del transporte de turismo y/o viajes especiales".
Gustavo Barnichea, directivo de la Cámara Argentina de Pequeñas Empresas de Transporte de Turismo de la provincia, advirtió que han transcurrido cuatro meses "sin poder trabajar por la paralización total de la actividad turística" y advirtió que "en Jujuy dependen de este rubro 250 familias".
Referentes de la entidad local entregaron un petitorio a las autoridades del Ministerio de Cultura y Turismo de la provincia, en el que detallaron sus demandas.
La semana pasada más de un centenar de prestadores de la actividad turística de Jujuy, particularmente agencias y guías, recibieron en conjunto una suma superior a los tres millones de pesos en subsidios, entregados por dicho Ministerio.
Los beneficiarios pertenecen a treinta empresas de viajes y turismo, como también 72 guías de turismo, todos habilitados, incluidos en el registro respectivo y que cumplieron con los requisitos enumerados en la resolución 74-ST-2020.
Además del reclamo por subsidios "o de préstamos a devolver cuando se reactive la actividad", el sector de los transportistas pide ser reconocido como un rubro más del turismo.
"Pedimos la declaración de emergencia y ser incluidos en el rubro turismo porque según el decreto N° 958 de 1992 (reglamentario de la Ley N° 12.346) figuramos como transporte, pero no recibimos ningún subsidio a nivel nacional de ese sector", se explica en el documento entregado a las autoridades.
En el escrito se plantea que debido a la paralización total de la actividad, que implica no obtener ingresos de ningún tipo, las pequeñas empresas del transporte del turismo deben afrontar dificultades económicas para el mantenimiento de las unidades, pago a empleados e impuestos.
"Si dejamos de pagar un seguro o un servicio se nos va a hacer después todo cuesta arriba", evaluó Barnichea.