Al menos cinco operarios murieron calcinados y más de una decena de trabajadores sufrieron severas quemaduras y heridas de distinta consideración como consecuencia del incendio desatado este miércoles por la tarde en el sector de destilería del ingenio La Esperanza, ubicado en el departamento San Pedro, a 68 km de San Salvador de Jujuy.
La cifra de víctimas fatales fue revelada por el fiscal Ernesto Resúa y luego confirmada por el ministro de Salud Gustavo Bouhid, en coincidencia con datos que manejaban fuentes del sindicato que nuclea a los trabajadores del establecimiento.
El Poder Ejecutivo provincial decretó dos días de duelo, para jueves y viernes, por el lamentable saldo de los luctuosos sucesos registrados en el establecimiento productivo azucarero.
Si bien los primeros testimonios refieren que el incendio estalló en la destilería de la planta de alcohol, hasta el momento se desconoce las causas del siniestro, que algunas versiones adjudican a las chispas producidas por un trabajo de soldadura que se realizaba en el sector.
Impactantes resultaron los testimonios de trabajadores cuando relataron que una vez iniciado el incendio, el estallido de los tanques de alcohol ocasionó que torrentes de fuego corrieran a gran velocidad por el suelo, haciendo que las llamas del combustible inflamado provocaran serias quemaduras en los pies y las piernas de numerosos operarios.
Varias dotaciones de bomberos de la Policía de la Provincia y voluntarios continuaban trabajabando esta noche para extinguir el fuego que durante la tarde se había expandido por un vasto sector de la planta, aledaña al portón principal de acceso, que colinda con viviendas cuyos moradores debieron ser evacuados.
También se procura bajar la temperatura de los demás tanques de alcohol, por el potencial peligro de colapso y explosión.
La tragedia se desencadenó alrededor de las 16:30 en el sector de la planta de alcohol de la fábrica, aunque hubo versiones que situaban el epicentro de una primera deflagración en una caldera.
Precisamente el estruendo de las fuertes explosiones alertó de la situación tanto al personal que trabajaba en otras áreas del establecimiento como a los vecinos de la zona, que en mucho casos, ante el cariz que tomaba el panorama, con lenguas de fuego que por momentos superaban los quince metros de altura y la posibilidad de que se produjeran nuevos estallidos, fueron evacuados.
La desesperación se apoderó de los trabajadores, que en una cantidad de entre 140 y 200 -según diferentes testimonios- estaban a esa hora abocados a sus labores. El temor por sus vidas hizo que la mayoría buscase salir del complejo fabril en una descontrolada huida, según reportaban periodistas de la localidad.
Dada la proximidad del hospital local "Nuestra Señora de la Buena Esperanza" y ante el peligro latente de eventuales explosiones, se dispuso evacuar también ese nosocomio, por lo que las ambulancias del SAME trasladaron a los heridos hasta el hospital "Guillermo Paterson" de la ciudad de San Pedro. Desde allí, los casos más graves fueron derivados al hospital "Pablo Soria" en la capital provincial, distante 65 kilómetros.
Acerca de las víctimas fatales, el fiscal actuante dijo esta noche que por el estado de los cuerpos se deberá efectuar estudios de ADN para determinar las respectivas identidades.
Hasta esta madrugada no se había reportado el hallazgo de más víctimas.