A pocas semanas de que se calmó el ambiente en Rusia, el Kremlin confirmó que Vladimir Putin recibió al líder del grupo de mercenarios Wagner, Yevgueni Prigozhin. Se trata de quien encabezó un levantamiento contra el mandatario ruso y llamó a marchar a Moscú.
La información fue confirmada por el portavoz de la Presidencia rusa, Dmitri Peskov, en su rueda de prensa diaria. “El encuentro tuvo lugar en el Kremlin y se alargó por casi tres horas”, señaló, quien agregó que la cita contó con 35 participantes.
Durante la misma, Putin “dio su valoración de la actuación de la compañía (Wagner) en el frente en el marco de la operación militar especial y también de los acontecimientos del 24 de junio”, en alusión al motín liderado por Prigozhin, quien lo abortó cuando sus soldados estaban a unos 200 kilómetros de Moscú.
Putin escuchó “las explicaciones de los comandantes” y les ofreció opciones de empleo después de la rebelión, según el Kremlin.
“Los propios comandantes expusieron su versión de lo sucedido y destacaron que eran acérrimos partidarios y soldados del jefe de Estado y del comandante en jefe”, agregó Peskov.
Los dirigentes de Wagner “también dijeron que estaban dispuestos a seguir luchando por la patria”. “Eso es todo lo que podemos decir sobre esa reunión”, concluyó.
La rebelión del grupo Wagner contra Vladimir Putin: qué pasó
Prigozhin, considerado durante un tiempo como aliado cercano del presidente ruso, Vladimir Putin, fue ganando influencia política y se lanzó en una confrontación con autoridades políticas y militares.
A fines de junio, el líder mercenario aseguró que las tropas rusas “han llevado a cabo bombardeos, bombardeos con misiles, contra nuestras bases de retaguardia”. Y agregó: “Un gran número de nuestros combatientes murió”. A su prometió “responder” a esos ataques.
“El comité de comando del grupo Wagner decidió que hay que poner freno a quienes tienen responsabilidad militar en el país”, señaló.
Se trató de un levantamiento por quienes están en el frente de la guerra con Ucrania que ya lleva más de un año y se ha estancado sobre el borde este. Allí, las tropas ucranianas intentan avanzar para recuperar algunas de las ciudades que estaban bajo control ruso y de Wagner.