Una remota isla llamada Kiritimati, de la nación situada en el Pacífico Sur, Kiribati, se convirtió en el primer territorio y, por lo tanto, en el primer país del mundo en recibir -como cada año- el Año Nuevo. Sus poco más de 7.300 habitantes gozan de este particular privilegio.
Al mismo tiempo, la primera gran ciudad del planeta en poder celebrar la llegada del Año Nuevo fue la de Nueva Zelanda, Auckland, donde sus habitantes también ya pasaron en la mañana de este domingo en la Argentina, la barrera de las 12 de la noche y ya celebrar la llegada del 2024.
Pero volviendo a Kiribati, que tiene por capital a Tarawa, además de tener este particular récord, suma otra situación prácticamente inédita: el archipiélago corre el riesgo de poder desaparecer debido a la crisis climática y a la subida del nivel del Océano Pacífico.
Incluso el presidente del país durante el período 2003-2016, Anote Tong, dio el fatal pronóstico que las islas llegarán a desaparecer y durante su mandato realizó giras internacionales a fin de poder encontrar una patria adoptiva para los kiribatianos. Cabe recordar que por su ubicación geográfica, además, es un territorio propenso a sufrir desastres naturales como huracanes y lluvias torrenciales.
Auckland: la primera gran ciudad del mundo en recibir el 2024
Nueva Zelanda y su ciudad de Auckland (no es su capital, pero sí su ciudad más importante), se convirtió en el primer gran país y primera gran urbe en recibir este 2024.
Como es tradición, se realizó la cuenta regresiva para la llegada del 2024 desde la torre Sky, en el centro de la urbe, seguida por un espectáculo de pirotecnia sobre la bahía de la ciudad neozelandesa.
En la ciudad, la lluvia fina que cayó durante el domingo había cesado a medianoche, antes del inicio de una cuenta regresiva en una pantalla digital iluminada cerca de la cima de la torre de observación y comunicaciones de 328 metros de alto.