El viernes por la noche, decenas de familiares de rehenes israelíes en manos del movimiento islamista Hamas y otras milicias palestinas acamparon frente al domicilio del primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu para pedir que pacte un acuerdo inmediato por el regreso de sus seres queridos a más de 100 días de secuestro y guerra.
La iniciativa surgió por el padre de un hombre de 28 años que se encuentra secuestrado por Hamas desde octubre, lo cual denominó al acampe como una “huelga de hambre” ante la vivienda de Netanyahu.
”Los días de gracia en los que arrastrabas los pies se han acabado”, expresó el Foro de las Familias de los Rehenes en un comunicado publicado durante el acampe e informado por la agencia de noticias Europa Press.
”Hemos estado suplicando desde hace 105 días. Ahora es el momento de exigirlo: hay que detener las ejecuciones de los rehenes, hay que demostrar liderazgo y hace falta una decisión valiente para avanzar en un plan que sabemos que está sobre la mesa”, señala el comunicado por el grupo de familiares de secuestrados.
Las familias exigen en particular la celebración de una conferencia internacional entre Israel y tres de sus principales aliados y mediadores con Hamas, como son Estados Unidos, Qatar y Egipto. De igual manera señala que así se podría “alcanzar un entendimiento sobre la forma de que los rehenes regresen a casa”.
El ataque sin precedentes lanzado por Hamas contra Israel el 7 de octubre se saldó con unos 1.200 muertos y en torno a 240 secuestrados, entre ellos una veintena con nacionalidad argentina.
Alrededor de un centenar fueron liberados, en su mayoría mujeres y hombres, durante una tregua en noviembre. Los servicios de Inteligencia de Israel estiman que todavía siguen retenidos en Gaza unos 130 rehenes, si bien teme que una veintena hayan muerto.