¿Alguna vez te preguntaste si los perros puede distinguir distintos idiomas? Un estudio utilizó resonancia magnética funcional para investigar cómo estos animales detectan y representan el habla en su cerebro. Los análisis demostraron que las regiones del cerebro que están involucradas en el procesamiento de los sonidos distinguían entre el habla natural y desordenada, especialmente en perros con cabeza más larga.
Qué plantea el estudio
El estudio llamado “Speech naturalness detection and language representation in the dog brain” fue publicado en Science Direct y se basó en la investigación de la capacidad del cerebro de los perros para detectar el habla, representar el lenguaje y revelar los procesos neuronales involucrados.
Para llevarlo a cabo, se reunieron 18 perros y se les presentó un idioma familiar (español) y otro desconocido (húngaro) durante una prueba de resonancia magnética funcional (fMRI). Utilizaron un análisis de patrones multivariados bajo la hipótesis de que la detección del habla se reflejará en patrones de actividad diferenciales frente al habla desordenada. En el estudio utilizaron un diseño de cuatro bloques: habla natural en un idioma familiar (NF), habla natural en un idioma desconocido (NU), habla desordenada en un idioma familiar (SF) y habla desordenada en un idioma desconocido (SU).
Cuáles fueron los resultados del estudio
El análisis identificó áreas específicas en el cerebro del perro que codifican características clave para la detección del habla y la representación del lenguaje. El clasificador detectó patrones de actividad distintos entre el habla natural y el habla confusa (NF + NU frente a SF + SU) en regiones auditivas casi primarias. Además, se encontraron diferencias significativas en los patrones de respuesta entre el habla natural en un idioma familiar y en uno desconocido (NF frente a NU).
No se encontraron diferencias significativas en los patrones cerebrales entre el habla confusa en un idioma familiar y uno desconocido (SF frente a SU), ni entre ambos idiomas en general (NF + SF frente a NU + SU) en la corteza auditiva de los perros. Las calificaciones de naturalidad para el habla natural y el habla mezclada fueron significativamente diferentes, aunque el habla mezclada recibió puntuaciones de naturalidad mucho más bajas, se observó una variabilidad en dichas calificaciones.
El resultado de la clasificación de “detección del habla” demuestra que el cerebro canino tiene la capacidad de diferenciar entre habla natural y habla repetida. Sin embargo, es crucial señalar que este hallazgo podría estar relacionado con distintos procesos subyacentes.
- El mecanismo subyacente podría ser la sintonización con el habla, lo cual estaría respaldado por respuestas más fuertes al habla natural en análisis univariados direccionales. Alternativamente, podría ser un mecanismo de detección de novedad más general, apoyado por respuestas más intensas a estímulos inesperados, como el habla desordenada en los análisis univariados.
- Las diferencias de respuesta entre el habla natural y la desordenada podrían deberse a que el habla natural se percibe como más “natural” (explicación perceptual) o a que mantiene una estructura temporal más intacta (explicación acústica).
- Finalmente, esta capacidad de responder de manera diferencial al habla podría ser específica del habla (un proceso relacionado específicamente con el habla) o bien un proceso auditivo general.