Termina el mes de marzo con una suba en la presión inflacionaria que se vuelve un freno para la recuperación del consumo masivo.
Según informó la consultora Scentia, en febrero el consumo creció 9,9% si se lo compara con el mismo mes pero del año pasado. En el primer bimestre del año, el alza fue de 8,4%. Esta recuperación de los supermercados arrancó en julio del 2021 y la tendencia continuó.
Sin embargo, la suba de los precios de alimentos, productores de higiéne y limpieza reconfiguran un escenario que vuelve a ser desfavorable para los consumidores.
Mientras el Gobierno anunció una “guerra contra la inflación”, el aumento que viene habiendo en los precios de todos los rubros ronda el 4%. A eso se suma los gastos propios que muchas familias tienen que llevar adelante a principio de año: útiles y ropa escolar para los niños.
“Cada vez que la inflación le saca ventaja al salario, el consumo se ve impacto negativamente”, declaró Osvaldo del Rio, director de Scentia.
“Eso se vio claramente en los ultimos años: cuando hay acuerdos paritarios, generalmente entre febrero marzo o abril, el consumo repunta un poco más pero luego vuelve a caer. Un crecimiento acelerado de la inflación respecto de los aumentos salariales van a dar un impacto negativo en el consumo”, explicó.