Familiares y amigos despidieron ayer los restos de Bruno Méndez, el joven de 25 años que fue asesinado a puñaladas el pasado lunes a la madrugada en el barrio Villa Alta en Puerto Iguazú. En el mismo hecho, su novia, de 18 años, fue abusada sexualmente.
En medio del dolor, los familiares volvieron a pedir justicia y adelantaron que se están organizando para la organización de una movilización.
Como viene informando este medio, por el crimen se encuentra detenido Jonathan Nazareno Ferreira (33), conocido como Polaquito, quien podría ser trasladado a prestar declaración indagatoria hoy.
Dolor, indignación y bronca fueron los sentimientos que se sintieron en el último adiós del joven. Su cotejo llegó cerca de las 10:30 horas al cementerio El Salvador, de la localidad, donde las lágrimas y los sollozos no pudieron contenerse.
Una familia a travesada por el dolor
Bruno Méndez volvió de Río Negro hace pocas semanas para cuidar de su madre enferma, sin embargo la mujer falleció, de igual manera el joven decidió permanecer en Iguazú.
Se instaló en una vivienda de alquiler ubicada en el terreno de la casa de su padre, allí conoció a su novia, una joven madre de 18 años que terminó siendo testigo de su asesinato y quien además fue abusada sexualmente por el homicida.
La joven, que, según detallaron fuentes del caso, está siendo asistida por profesionales de la Policía de Misiones, no participó de la despedida.
Se esperan los informes periciales para que sea trasladada a declarar y no se descarta que, por más que sea mayor de edad, declare en Cámara Gesell por la gravedad de los hechos.
La familia de Bruno manifestó que por el momento no van a hacer declaraciones. No obstante dejaron claro que no dejarán que la muerte de Bruno quede en la nada
“El culpable debe pagar el daño que le hizo a Bruno y que hizo a la familia, nadie merece perder a alguien de esta forma, nadie merece ese final”, recalcaron.
Fuente: El Territorio