Según el Feng Shui, una antigua filosofía china que ofrece diferentes técnicas para lograr equilibrio y bienestar, el hogar puede convertirse en un espacio vulnerable a la entrada de energías negativas. Desde esta visión, el riesgo de que estas malas energías se instalen aumenta cuando no se siguen las recomendaciones de esta práctica.

En consecuencia, esas energías negativas pueden afectar tanto a ciertas áreas específicas dentro de la casa como a las personas que viven en ella. Como no siempre es fácil identificar qué objetos bloquean el flujo armonioso, el Feng Shui propone una lista de elementos que es mejor eliminar para prevenir problemas y mantener un ambiente saludable.
Los elementos que no traerán abundancia a tu hogar, según el Feng Shui
- Flores marchitas y polvo: para el Feng Shui, es esencial contar con representaciones naturales dentro del hogar, pero las flores secas o los cuadros de paisajes llenos de polvo provocan que la energía se estanque y pierda fluidez.
- Espejos: aunque son elementos muy útiles en la decoración, es recomendable limitar su cantidad en la casa, ubicarlos correctamente y reservarlos para espacios específicos, como el baño o el dormitorio principal.
- Objetos de segunda mano: aunque la tendencia a decorar con antigüedades está en auge, el Feng Shui advierte que estos objetos arrastran las energías de sus antiguos dueños, lo que puede interferir con la armonía del ambiente.

- Objetos puntiagudos: elementos como cuchillos y objetos afilados se consideran que “cortan” la energía positiva, afectando el bienestar. Por eso, se aconseja guardarlos en cajones para evitar que generen desequilibrios energéticos.
- Cuadros o fotos con imágenes tristes: estas piezas atraen energías negativas y convierten el espacio en un lugar cargado de tensión, lo que podría provocar conflictos y problemas de salud.