En el mundo de la astrología, cada signo tiene sus luces y sombras. Mientras algunos destacan por su sensibilidad o capacidad de liderazgo, hay otros que se caracterizan por tener una habilidad casi camaleónica para adaptarse, convencer… y manipular.
Según los astrólogos, hay un signo en particular que se lleva todos los laureles cuando se trata de moverse con destreza en el arte de la persuasión: Géminis.

Géminis, el maestro del doble discurso
Nacidos entre el 21 de mayo y el 20 de junio, los geminianos están regidos por Mercurio, el planeta de la comunicación. No es casual que este signo de aire tenga fama de saber cómo decir lo que el otro quiere escuchar —y hacerlo con total naturalidad.

Según Horóscopo Negro, “Géminis tiene una capacidad única para conectar ideas, cambiar de tema con velocidad y hacer que siempre parezca que tiene razón”. Esto, sumado a su naturaleza inquieta y su dualidad característica, lo convierte en un verdadero maestro en el arte de convencer.
Pero no se trata solamente de hablar bien. Géminis también es rápido mentalmente, curioso y encantador. Estas cualidades lo ayudan a leer al otro con facilidad y ajustar su discurso para lograr lo que quiere, sin que el resto lo note.

Eso sí, no todo es intencional. A veces, su manipulación no es maliciosa, sino parte de su necesidad constante de movimiento, de explorar nuevas opciones y de evitar el aburrimiento a toda costa. “Puede entusiasmarte con un plan, y cambiarlo al minuto siguiente sin culpa”, explican los expertos.
Otros signos del zodíaco que también juegan fuerte
En el ranking de los signos más manipuladores, Géminis lidera cómodo. Pero no está solo. Le siguen de cerca Aries, con su actitud dominante; Piscis, que usa la emocionalidad como herramienta; Cáncer, que se refugia en el drama y la culpa; y Capricornio, que manipula con frialdad estratégica.

Cada uno tiene su estilo, pero Géminis, sin dudas, destaca por hacerlo con una sonrisa. La próxima vez que escuches un argumento impecable y casi imposible de rebatir, prestá atención. Tal vez estés frente a un geminiano.