Entre Ríos fortalece las acciones de control ante la reciente confirmación de un caso de sarampión en la provincia y el registro de nuevos casos sospechosos. Con la llegada de dosis contra la enfermedad, organismos de salud instan a la población a vacunarse.
Tras la alerta epidemiológica, la cartera sanitaria entrerriana intensificó la vigilancia de la enfermedad, a través de los equipos de salud, e instó a verificar y completar esquemas de vacunación. En los últimos días ingresaron 16.000 dosis de la vacuna contra el sarampión provistas por Nación para garantizar la disponibilidad.

Desde Epidemiología, Diego Garcilazo recordó que hay un solo caso confirmado en la provincia, con aumento en casos sospechosos. “Tras la confirmación del primer caso, aumentó la alerta entre los profesionales, lo que permite detectar sospechas más rápido y reforzar la vigilancia. Esto no significa que todos sean sarampión”, explicó.

Considerando el contexto nacional y provincial, las autoridades recordaron que todas las personas desde el año de vida deben tener el esquema completo de vacunación contra sarampión y rubéola, según el Calendario Nacional de Vacunación:
Esquema de vacunación contra sarampión y rubéola
- De 12 meses a 4 años: 1 dosis de vacuna triple viral.
- Mayores de 5 años, adolescentes y adultos: al menos 2 dosis con componente contra sarampión y rubéola.
- Personal de salud en nivel asistencial: 2 dosis con componente contra sarampión.
Cabe mencionar que el 10 de noviembre de 2025 la Organización Panamericana de la Salud (OPS) anunció que la Región de las Américas perdió su estatus como región libre de transmisión endémica del sarampión, tras restablecerse la transmisión endémica en Canadá, donde el virus circuló durante al menos 12 meses.
Sobre la enfermedad
El sarampión es una enfermedad viral altamente contagiosa, que puede afectar a todas las edades. Sus síntomas más frecuentes son fiebre alta, manchas rojas en la piel, secreción nasal, conjuntivitis y tos.
Puede ser grave, sobre todo en menores de 5 años o personas malnutridas, generando complicaciones respiratorias como neumonía o del sistema nervioso central como convulsiones, meningoencefalitis, ceguera, encefalomielitis postinfecciosa con retraso mental grave y trastornos degenerativos tardíos, o incluso provocar la muerte.
Se transmite mediante gotas de nariz, boca o garganta de personas infectadas y el virus puede permanecer activo y contagioso en el aire o sobre superficies hasta por dos horas.

































