La Cámara de Casación Penal de Paraná consideró hoy que se debe realizar un nuevo juicio por el femicidio de la joven Micaela García, ocurrido en Gualeguay en 2017, porque se tiene que analizar si Néstor Pavón, uno de los condenados, "fue encubridor de un hecho cometido por otra persona o se autoencubrió".
Los jueces
Marcela Badano, Marcela Davite y Hugo Perotti
leyeron esta mañana los fundamentos del fallo por el cual el 14 de junio
(31), autor del crimen, pero
(35), que había recibido cinco años por encubrimiento.
Según los magistrados, se debe analizar en un nuevo juicio si "fue encubridor de un hecho cometido por otra persona o se autoencubrió".
Acerca de la sentencia sobre este imputado, indicaron que "
" sin brindar "respuestas suficientes" ni valorar "la prueba de manera conjunta".
De esa manera, coincidieron en el pedido de la fiscalía y la querella acerca de que las pruebas presentadas en el juicio no se condicen con la hipótesis de que Wagner actuó solo.
Por eso, ordenaron "anular lo resuelto" y que "se realice un nuevo juicio para determinar la responsabilidad de Pavón en el abuso y homicidio" de la joven.
Respecto de Wagner, los camaristas consideraron que la prisión perpetua que se le dictó es "correcta" y "ajustada a derecho", y por eso "no puede ser oído" el pedido de Wagner de ser condenado como autor del abuso sexual con acceso carnal y no por el femicidio.
El tribunal de Casación
remarcó
que fue un crimen de esas características y destacó
del caso "en el terrible contexto de violencia estructural que existe contra las mujeres".
Micaela García (21), estudiante de Educación Física, desapareció el 1 de abril de 2017 tras salir de un local bailable y fue interceptada por Wagner, un hombre con antecedentes por violaciones, pero que estaba en libertad condicional.
El cuerpo de la joven fue hallado una semana después semienterrado entre pastizales cerca de la ruta nacional 12, en Gualeguay, y los forenses determinaron que había sido violada y estrangulada el mismo día en que había desaparecido.
El Tribunal de Juicio y Apelaciones de Gualeguay condenó el 6 de octubre de 2017 a Wagner a la pena de prisión perpetua por "abuso sexual con acceso carnal en concurso ideal con homicidio agravado por ser con alevosía, criminis causa y violencia de género".
También fue condenado Pavón a cinco años de prisión por encubrimiento agravado, al ayudar a Wagner a eludir a la Policía y fugarse a la provincia de Buenos Aires, donde finalmente fue capturado.
Un tercer acusado, Gabriel Otero, que es hijastro de Wagner, fue absuelto por decisión de los jueces ante la falta de pruebas en su contra.