El mediocampista chileno Carlos Palacios volvió a quedar en el centro de la escena tras la dura derrota de Boca Juniors ante River Plate por 2-1 en el Superclásico. Aprovechando el día libre que el entrenador Fernando Gago otorgó al plantel, Palacios viajó directamente a Chile para visitar a su familia. Sin embargo, su decisión genera revuelo en el club, especialmente por antecedentes recientes.
El volante de 24 años partió hacia su país poco después del partido, trasladándose rápidamente desde Ezeiza. Según trascendió, este martes deberá reincorporarse obligatoriamente a los entrenamientos en el predio de Boca. La preocupación surge porque no es la primera vez que Palacios realiza este tipo de movimientos en medio de la temporada.
Antecedentes que preocupan en Boca
A finales de marzo, durante el parate por la doble fecha FIFA de las Eliminatorias Sudamericanas rumbo al Mundial 2026, Palacios ya había protagonizado una situación polémica. En aquella ocasión, se ausentó de una práctica sin permiso, lo que motivó su exclusión del partido frente a Newell’s Old Boys por decisión del cuerpo técnico.

Para empeorar la situación, cuando intentaba viajar a Chile junto al defensor Ayrton Costa, sufrió un accidente automovilístico camino al aeropuerto. Aunque no recibió sanciones dirigenciales, Gago decidió aplicarle un castigo deportivo y lo marginó de la convocatoria.
Pese a aquel incidente, el chileno logró recomponer su relación con el plantel y recuperar la titularidad. Su rendimiento había sido sólido hasta el Superclásico, donde no logró destacarse, sobre todo en un primer tiempo muy flojo para todo el equipo. Ahora, tras su nuevo viaje, los hinchas desaprobaron su actitud en redes sociales.
El polémico gesto que encendió la polémica
Antes del inicio del partido frente a River en el Monumental, Carlos Palacios realizó un gesto provocador que no pasó desapercibido: simuló sentir frío llevándose las manos a los antebrazos mientras se dirigía al vestuario tras la entrada en calor. Un gesto que históricamente varios jugadores de Boca utilizaron para provocar a la hinchada rival.
