Un joven quiso prepararse algo para comer tras una larga noche, encendió la cocina y puso la olla, pero el cansancio le jugó una mala pasada porque se durmió y terminaron despertándolo los bomberos. Finalmente todo quedó en un susto y una anécdota juvenil.
En la mañana del domingo todo era muy tranquilo por la zona céntrica de Corrientes, hasta que en el edificio de calle San Juan casi Junín el humo comenzó a ganar la calle. Los vecinos convocaron urgentemente a los bomberos.
El fuego de la cocina se propagó gracias a algunos materiales inflamables que estaban al alcance y llegó a prender una cortina. Los vecinos pidieron la intervención de urgencia a los bomberos que lograron socorrer al edificio en cuestión y sofocar el incipiente incendio.