Alan Carreras es un cordobés de 38 años que, como muchos otros, no quiso perderse el Mundial Qatar 2022 y decidió desprenderse de una reliquia maradoniana para poder hacerlo. En julio, lanzó una rifa para recaudar el dinero para los pasajes y logró juntar los dos millones de pesos necesarios.
El sorteo consistía en que, por 2.500 pesos, obtengas una chance para ganar la réplica de la remera que la Selección Argentina utilizó en el Mundial de México 1986 firmada por Diego Maradona, cuando vino a Córdoba como DT de Gimnasia de La Plata.
Una rifa maradoniana que logró alcanzar el objetivo
El sorteo fue un éxito y Alan vendió todos los números. Como consecuencia, recaudó cerca de dos millones de pesos que le permitieron compar el pasaje aéreo a Qatar y el tramo Córdoba- Buenos Aires.
“De Ezeiza salgo el 28 de noviembre a Ámsterdam y llego el 29 a la mañana. A la tarde, salgo a Doha, Qatar, donde voy a estar llegando cerca de la medianoche. Al otro día, juega Argentina-Polonia, para ese partido no tengo entrada pero estoy tratando de conseguir alguna”, comentó Alan en diálogo con Vía Córdoba.
Sin embargo, antes del viaje, deberá desprenderse de la casaca firmada por el 10. “Cuando a mí me llegó la autentificación de la firma, que me la manda un perito, ahí me di cuenta que la camiseta se iba. Para mí es un sacrificio enorme entregarla pero estoy preparado”, aseguró y detalló que el 21 se conocerá al afortunado.
Alan reconoció que el sorteo no fue nada fácil, pero aseguró que su fe en la Selección es mucho mayor. “Como hincha, tengo mucha fe. Desde el momento que se me ocurrió sortear la remera, dije ‘Es éste el Mundial y se va a dar’. Si no tuviese ésta fe, no sorteo la remera ni loco”, reconoció.
El apoyo de la familia, un factor esencial para su viaje a Qatar
“Estuve a punto de cancelar el vuelo, incluso cancelé el primer tramo de Córdoba- Buenos Aires, porque mi papá está bastante complicado de salud”, contó Alan. Y agregó: “Le conté que me iba 22 días y me dijo que vaya, que si es mi sueño, cuando vuelva, lo vamos a festejar juntos”.
En Córdoba también lo esperarán sus tres hijos, uno de ellos llamado Diego en honor al 10, y su esposa. “Lo positivo de esto es que tengo el apoyo de mi familia, de mi papá y de mi esposa, que se banca la locura de irme tantos días”, expresó y detalló que será la primera vez que irá a un Mundial.
Una fe que lo acompaña desde Córdoba
Lejos del común de los hinchas que fueron y van a Qatar, Alan tiene los tickets para los últimos partidos. “Compré para Cuartos de Final, Semifinal y Final. Las últimas dos son entradas condicionadas porque tienen validez sólo si Argentina llega a esas instancias”, presagió.