De visita en la ciudad de Río Cuarto, donde se desempeñó como párroco en la Iglesia Catedral, el actual obispo de Quilmes y titular de Cáritas nacional, monseñor Carlos Tissera, expresó su preocupación por la legalización del juego online en la provincia de Córdoba.
Sin rodeos, al ser consultado por la ley aprobada a fines de diciembre en medio de una gran polémica, el religioso expresó: “Uno que habitualmente está tratando el tema de las adicciones, lo ve como algo preocupante. Eso hace que se agudice aún más una realidad que daña la vida familiar y en comunidad”, comentó en declaraciones a Puntal.
Sin dar concesiones a la actividad, el obispo aseguró: “El juego no es ningún trabajo genuino. Puede serlo para un empleado que está en ese establecimiento”, argumentó.
“Una cosa es la diversión y otra es fomentar una adicción que hace mucho daño, con catástrofes familiares que se producen por personas que se enferman”, señaló.
Finalmente dijo que “por eso es la objeción que uno presenta frente a este tipo de acciones. En épocas de crisis es cuando crecen estas posibilidades. Hay gente que está pasando por problemas y tiene la esperanza de ganar millones. La realidad es que, en el juego, la banca se queda siempre con la mayor parte”, finalizó.
