Empleados de una sede de la empresa de gaseosa Coca-Cola ubicada en Monte Cristo, Córdoba, iniciaron hace poco más de una semana un paro reclamando la reapertura de paritarias. Ante este escenario, la firma despidió a 51 personas, pero el Ministerio de Trabajo dictó la segunda conciliación obligatoria.
Ahora, los 51 despidos anunciados por la empresa quedaron en pausa y, con el correr de las horas, la distribución de bebidas se normalizará. Sin embargo, el grupo de trabajadores no retornará a la planta como suele suceder luego de cada conciliación.
Pero sí continuarán recibiendo los haberes correspondientes. El delegado del gremio de los trabajadores, Daniel Ferreira, expresó que los despidos quedaron en “stand by”, que todo vuelve al día uno y calificó de “injusta” la negación del retorno a la actividad laboral.
Qué reclaman los empleados de Coca Cola en Córdoba
Según la Federación Argentina de Trabajadores de Aguas Gaseosas (Fataga), la discusión tiene un prolongado recorrido. Además, ostenta motivaciones políticas por parte de un sector de delegados enrolados en agrupaciones como el Polo Obrero, afirmó el gremio en un comunicado reciente.
El sindicato local (Sutiaga) y el cuerpo de delegados iniciaron la medida de fuerza por tiempo indeterminado el lunes 22 de mayo. “Pedimos un aumento salarial y un bono inmediato”, concluyó Ferreira en diálogo con Radio Mitre.