Tras dos reprogramaciones, el Sindicato de Obreros y Empleados de Empresas de Limpieza, Servicios y Afines de Córdoba (Soelsac) llevó a cabo la asamblea extraordinaria. Se trató de un evento multitudinario que requirió un fuerte operativo policial. Sin embargo, la reunión no finalizó con resultados y se decidió ir a cuarto intermedio.
Alrededor de 3.500 personas dijeron presentes en el club Quilmes de Villa Allende, para designar a la junta electoral que regirá la elección de autoridades de ese gremio, prevista para el 20 de diciembre. Si bien la cita era para las 10.30, el encuentro comenzó pasadas las 14.30.
LA INSÓLITA VOTACIÓN DE SOELSAC
Los miles de asistentes debían elegir entre dos facciones. La votación era insólita, ya que debían elegir levantando la mano. La masividad impidió que el conteo se hiciera correctamente y si bien se dispuso de cámaras y observadores del Ministerio de Trabajo, no se pudo conocer el resultado.
En ese marco, se dieron varios momentos de tensión con cánticos de “asesinos” y “no nos vamos nada” de parte de ambas facciones. La votación se intentó en dos oportunidades, pero no se obtuvo un resultado claro, y decidieron ir a cuarto intermedio y a una posterior reprogramación de fecha.
FUERTE OPERATIVO POLICIAL EN LA ASAMBLEA DE SOELSAC
320 efectivos de la Guardia de Infantería, SEOM, Canes, Caballería, DUAR, ETER, Explosivos, Motocicletas, CAP, Planificación y Diseño Prevencional, entre otras dependencias de la Policía provincial intervinieron en el accionar en el club Quilmes de Villa Allende.
El despliegue inició bien temprano a 100 metros alrededor de las instalaciones del club: el peaje sobre la ruta E-53 y la zona conocida como el Portón de Piedra. Una importante cantidad de efectivos cachearon a los pasajeros de los colectivos que ingresaron por ambos sectores.
El horario de inicio de la reunión estaba previsto para las 10, pero alrededor de las 12 los asistentes seguían esperando para poder ingresar a las instalaciones del club. Luego de dos horas de espera, los organizadores colocaron baños químicos y llevaron botellas de agua para los asistentes.
En medio de los cacheos, una persona fue detenida, ya que tenía entre sus pertenencias un arma blanca.