En la tarde del martes, dos obreros perdieron la vida en mientras cavaban un pozo negro en la casa de un vecino. La tragedia ocurrió en Despeñaderos y ambos (eran padre e hijo) murieron intoxicados.
Las víctimas son Hugo y Matías Ortiz de 45 y 18 años, según relata Resumen de la Región. Los obreros estaban cavando un pozo de 13 metros de profundidad cuando, por causas que se intentan establecer, el hijo empezó a descomponerse por la inhalación de gases tóxicos en el fondo de la excavación.
Ante la situación, su padre bajó rápidamente para auxiliarlo y sufrió las mismas consecuencias. Personal médico trabajó en el lugar y constató el deceso de ambos obreros.