Un perro de Gendarmería descubrió 21 kilos de cocaína que eran trasladados en un colectivo del transporte interurbano desde Salta hacia Córdoba.
Según el Ministerio de Seguridad de la Nación, miembros de la sección vial Cabeza de Buey controlaron a un micro de la empresa Flecha Bus que, proveniente de Salvador Mazza, se dirigía hacia la ciudad de Córdoba.
Con la asistencia del can antinarcóticos Tyler inspeccionaron la bodega de los equipajes. Fue entonces cuando el perro reaccionó ante cuatro encomiendas.
Con la intervención de la Justicia Federal, los gendarmes trasladaron los paquetes sospechosos hasta la sede de la unidad.
En primer término descubrieron la presencia de 20 panes de cocaína, cuyo peso total ascendió a 21 kilos 175 gramos. En las otras cajas había 18 kilos de hojas de coca en estado natural.