Un estudio elaborado conjuntamente por la Agencia de Extensión Rural (AER) Laboulaye del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (Inta) y las regionales Aapresid y Crea de esa ciudad del sur provincial concluyó que hay más de 700.000 hectáreas bajo el agua en el límite entre Córdoba y Buenos Aires.
Utilizando imágenes satelitales con datos hasta el 17 de enero, se estima que hay 468 mil hectáreas completamente inundadas en el departamento Presidente Roque Sáenz Peña, y 115 mil en General Roca; a lo que se suman 131 mil del partido bonaerense de General Villegas.
Esto significa el 55 por ciento del total de superficie de estas tres jurisdicciones (1,29 millones de hectáreas): 55 por ciento de Roque Sáenz Peña, 76 por ciento de General Villegas y 43 por ciento de General Roca, de acuerdo al relevamiento efectuado.
El informe se complementó con una encuesta a 25 productores agropecuarios, que aportó datos de 102 establecimientos, que abarcan un área de 65 mil hectáreas (8,25% de la superficie agrícola de la zona, situada en 0,79 millones de hectáreas). Esto permitió proyectar el impacto de las inundaciones en los cultivos.
El cálculo es que el 27 por ciento de las tierras agrícolas tiene algún tipo de daño por inundación: 10 por ciento del área que no se pudo sembrar y 17 por ciento donde se perdieron los cultivos implantados.
A todo esto, hay que sumar que el 16 por ciento de maíz y soja que aún queda en pie tiene estado "regular", por lo que podrían sumarse a las pérdidas si ocurrieran nuevas lluvias.
El estudio consigna que "De registrarse nuevamente precipitaciones de cierta intensidad o movimientos de agua desde otras zonas, podrían pasar a la categoría de perdidos debido a la situación de cercanía de napa o encharcamiento actual".
"En el caso de que ocurran pocas precipitaciones inferior a lo normal en los próximos 45 a 60 días, estas zonas podrán recuperarse pero es esperable un rendimiento inferior o muy inferior al promedio y con serios problemas para la cosecha", precisa el reporte.
El cultivo que ha sufrido mayor pérdida de área fue la soja de segunda, con un 32 por ciento sobre la superficie sembrada total de 8.353 hectáreas. Luego le siguen soja de primera, con 20 por ciento de pérdida sobre 26.811 hectáreas; maíz tardío, con 18 por ciento sobre 9.774 hectáreas; y maíz temprano, con 13 por ciento, sobre 9.213 hectáreas.
Las zonas más afectadas son Santa Regina, Villa Rossi, Melo, Serrano, Tres Colonias y La Providencia, donde las pérdidas superan el 60 por ciento de la superficie con cultivo y con la imposibilidad de acceder a muchos campos debido al mal estado de los caminos.
Asimismo, en esta región hay establecimientos dedicados al engorde ganadero y tambos, que lógicamente sufren también las consecuencias de las lluvias.
"En la actualidad, se estima que hay un total de 15 mil animales que se encuentran en la zona, afectados por excesos hídricos", señaló el documento.