El conjunto principal de Talleres ya había empatado con el de Instituto 1-1. Ahora era momento de los remanentes, pero entre los titulares no se podía ver a Mauricio Caranta.
Una de las figuras que llegó al conjunto de barrio Jardín no estaba ni en la Boutique.
Es que, según informaron desde el conjunto albiazul, el arquero había sido mordido por un perro en el tobillo.
Desde el cuerpo técnico de Talleres decidieron que el arquero no ataje y que en su lugar ingrese Ignacio Chicco.