Con el intenso viento de este martes se complicó el trabajo de los bomberos y se agravó la situación en la Provincia, con nuevos focos en las zonas serranas. Bomberos, soldados del Ejército Argentina y 10 helitransportados intentaron controlar las llamas en el Cerro Mogote, uno de los puntos que volvió a reactivarse.
También se debieron agregar para esta zona personal de cuarteles de Tanti y Bialet Massé, el que ingresó por el camino de la Ochoa y trabajó sobre los flancos este y oeste.
En el sector conocido como La Mezquita trabajaban esta tarde cisternas de La Calera, Saldán y Recursos Hídricos, junto con dos efectivos de Defensa Civil y cinco del Plan Provincial de Manejo del Fuego, los que hicieron las recargas de los aviones hidrantes.
Estas aeronaves, más unas 50 personas, combatieron las llamas en el camino secundario que comunica Yocsina con La Calera. Hasta anoche, había bomberos de los cuarteles de Mendiolaza, Cosquín, Valle Hermoso, La Falda, Bialet Massé, Malagueño, La Calera, Saldán, Villa Carlos Paz y Tanti para controlar este sitio.
También se originó un nuevo foco de magnitud en un camino interno que conecta la E55 con la autopista Villa Carlos Paz, donde intervino personal del Plan Provincial de Manejo del Fuego (PlanPMF), bomberos y dos aviones hidrantes.
En Ciudad de América el fuego quedó controlado, aunque esta tarde permanecía una guardia de ceniza integrada por bomberos de la región junto con personal del PlanPMF.
También en Luyaba, 90 bomberos se quedaban al aguardo de que el fuego no volviera a reactivarse, mientras que en Villa Gutiérrez, 20 hombres permanecían apostados.
Debido a los focos y al fuerte viento, la Policía Caminera debió realizar un corte en la ruta 36, entre el peaje y el cruce Alto Fierro.
Por otra parte, en la zona de Almafuerte (en el sector conocido como Alma Negra) se activó un foco y trabajaban los bomberos de Colazo, Oliva, Laguna Larga, James Craik y Río Segundo.
En Alta Gracia, en la banquina sobre barrio La Perla; en Alpa Corral, en la zona de Unión de Ríos); y en Colonia Caroya, se trabajó en frentes más pequeños para terminar con el avance de las llamas.