La Municipalidad de Río Tercero labró un acta de infracción por una fiesta clandestina, a la que habían concurrido 105 menores de 17 años en la madrugada de este sábado.
Un llamado anónimo alertó a la Policía, que informó a la Fiscalía ante las restricciones por el coronavirus, según publicó La Voz.
Los oficiales de seguridad se limitaron a acompañar a los funcionarios municipales al domicilio, y al llegar constataron que entre los presentes no había mayores de edad.
El evento se suspendió y no hubo detenidos, pero desde el municipio lo tomaron como un hecho "grave" y no descartan que haya una denuncia.