Pese a ser declarado "ilegal" por el propio intendente Ramón Mestre, desde la tarde de ese lunes se puede pedir un servicio de Uber en la ciudad de Córdoba.
Las últimas 24 horas fueron convulsionadas en la Capital: taxistas y remiseros cortaron puntos neurálgicos y todo se volvió un infierno.
Hubo agresiones, acusaciones cruzadas y una ciudad furiosa.
Y en el medio, varios pedidos de viajes en Uber.
Varios choferes se mantuvieron en el anonimato por razones obvias, pero otros se animaron a contar su experiencia.
Tal fue el caso de Nicolás Di Fiore, quien vía Twitter compartió un relato donde muestra que el servicio no es "color de rosas": como todo en la vida, tiene pros y tiene contras.
Un pro (a grandes rasgos): en seis horas de trabajo, con 11 viajes, ganó apenas 437 pesos (1.237 entraron, pero 800 se fueron en nafta).
Una contra (a grandes rasgos): le llovieron los pedidos de viajes, al punto de que pudo apenas aceptar 17 y debió rechazar 69.
Así lo contó Nicolás: