Con escenas de dolor arrancó este miércoles el juicio por el asesinato de Azul Montoro, una joven trans y trabajadora sexual apuñalada en octubre de 2017 en una vivienda del centro de la ciudad de Córdoba.
Es la primera vez que la Justicia cordobesa caratula como "femicidio" el asesinato de una mujer trans. Durante la Instrucción se resolvió que el que haya sido trabajadora sexual no invalida que haya sido víctima de violencia de género.
Azul, quien se ganaba la vida como trabajadora sexual, fue asesinada de al menos 18 puñaladas, y diversos golpes, en una vivienda ubicada en el Centro de Córdoba. Sucedió el 18 de octubre de 2017 por la madrugada.
Fabián Alejandro Casiva, el acusado, se enfrenta a una posible pena de prisión perpetua.