Vaca Muerta aumenta su producción y apunta a la independencia energética del país

 La formación es de 30.000 km2, en donde la compañía YPF tiene 12.000 km2 que están dando frutos. Allí se encuentran operando 11 equipos de perforación y poseen 650 pozos activos.

Para poder llevar adelante esto, la firma tiene socios estratégicos, como el caso de Chevron y Dow, con quienes explota Loma Campana en el primer caso y El Orejano en el segundo, y además con el objetivo de sumar dos proyectos más antes de fin de año en una etapa de desarrollo masivo que dejará en claro el aumento de producción que ya está en proceso.Además hay que tener en cuenta que también explota 17 proyectos pilotos en distintos bloques. Pero solo con Loma Campana el objetivo para el 2024 es alcanzar una producción de 100.000 barriles diarios.

Las operaciones en Vaca Muerta significan un hecho histórico en materia energética, de ser pioneros el objetivo es convertirse en líderes en este sector y de la mano con eso un objetivo superior: lograr la independencia energética del país. Y todo parece encaminado a eso. Solo hay que tener en cuenta un dato: Vaca Muerta apunta a tener una producción para los próximos cinco años que dará un salto indiscutible pues de los 40.000 barriles diarios se planea llegar a los 250.000.

Esto convertirá en definitiva a la cuenca neuquina en los próximos meses en la principal cuenca productiva de petróleo de la Argentina. En gas el salto también será enorme: de 7,9 Mm3/d a 50,5 Mm3/d.

La importancia de Vaca Muerta incluso se puede apreciar en la inversión que se ha realizado de 1.500 millones de dólares este año y la que está prevista. Hasta el momento son 8.400 millones de dólares, lo que significa a su vez la mayor inversión en Argentina a través de empresas como Chevron, Dow, Equinor(ex Statoil), Petronas, Total, Shell y Schlumberger.Pero no se trata solo de producción, sino que esto debe ir acompañado de una ecuación económica en donde los costos también cierren, y por eso hay un fuerte trabajo en hacer rentables los mismos, bajándolos en un 55% desde fines del 2015 y con una proyección de que esto continúe.

A modo de ejemplo, Gustavo Atie –gerente regional no convencional- comentó que en el 2015 el costo de producir un barril de petróleo era de 29,6 dólares "y hemos logrado bajarlo y la idea es terminar el 2018 en menos de 12". Incluso el 2019 tiene como meta que sea entre 10 y 8 dólares. Mientras que en gas el objetivo este año es llegar a menos de 1 dólar de los 2,3 dólares por MBTU de los que se partió.

En la actualidad YPF emplea a 470 personas en forma directa, pero el número asciende rápidamente por arriba de los 4000 con todo el trabajo que se genera con otras empresas por los servicios que se prestan.