El hecho ocurrió en la ciudad de Puerto Madryn y el protagonista fue un menor de 16 años, que se hizo de las tarjetas de crédito y débito de un vecino sin que este se percatara en principio. De esta manera comenzó un raid de compras y gastos que en definitiva fue lo que lo terminó delatando.
El damnificado realizó la denuncia correspondiente, y a través del home banking pudo hacer un seguimiento de los lugares donde se iban produciendo los gastos, y así dar con quien era el poseedor de las tarjetas.
Fueron tres días de uso de los plásticos y fue en plena vía pública donde lograron encontrar al menor que se desplazaba con bolsas de las compras, con prendas de vestir, un reloj y hasta se había hecho un tatuaje.
Al verse abordado el joven intentó huir, pero a los pocos metros fue detenido por el accionar de transeúntes y de los propios vecinos. La familia fue puesta al tanto de la situación y se realizará la investigación judicial correspondiente.