La XVII Feria del Libro de Catamarca concluyó el domingo 9 de noviembre con un balance récord de 36.556 visitantes en cuatro días de programación. Con más de 125 actividades en el Centro de Arte y Tecnología Aplicada (CATA) y el Cine Teatro Catamarca, el evento reafirmó su lugar como uno de los encuentros culturales más importantes del Noroeste argentino, combinando literatura, arte, música y nuevas tecnologías.
Cuatro días de cultura y participación
Durante esta edición se desplegaron 60 stands, 50 presentaciones de libros, 23 talleres, 20 charlas y paneles, 13 obras de teatro, 17 recitales y 3 intervenciones artísticas que llenaron de vida el centro de la ciudad.
La ministra de Cultura, Turismo y Deporte, Daiana Roldán, celebró el cierre del evento destacando “la alegría de culminar una feria en un espacio renovado, con una programación amplia y diversa, y una gran participación del público”.
Roldán subrayó además la importancia de la nueva ubicación: “Para muchos visitantes fue la primera vez que pudieron participar, porque se hizo en el centro de la ciudad”.
Una feria que crece en público y propuestas
La secretaria de Gestión Cultural, Laura Maubecin, realizó un balance “muy positivo” del evento, destacando el crecimiento sostenido en público y actividades.“Hubo más de 2.000 personas en los talleres del CataLab y muchas más en las actividades paralelas. Nos visitaron escuelas y autores de distintos puntos de la provincia —Antofagasta, Pomán, Santa María, Andalgalá, Tinogasta, Belén, Ancasti, Santa Rosa y Valle Viejo— además de numerosos turistas”, explicó.
Maubecin destacó que la feria “se consolida como una propuesta cultural y turística, y CATA como una puerta abierta a la cultura catamarqueña en toda su diversidad”.
Ventas récord y fuerte impulso editorial
El reporte del Banco Nación registró un total de $27.844.018,30 en 800 operaciones, con un ticket promedio de $36.830. A ello se suman las ventas en efectivo de la Biblioteca Julio Herrera, por $1,5 millones, y las de la Tienda CATA, que superaron un millón de pesos.
Las librerías y editoriales coincidieron en calificar esta edición como “muy exitosa”, destacando el interés del público y la accesibilidad del nuevo espacio.
Desde Catálogos (SFVC), Sol y Nazarena contaron que “los libros más buscados fueron los de Gabriel Rolón y Viviana Rivero, además de los títulos juveniles y educativos”.Por su parte, José, de Libros para Emprendedores, destacó: “Fue una experiencia muy positiva por el contacto con el público y las editoriales. Me encantó ver tanto entusiasmo y una organización impecable”.
Desde Belén, Nancy, de Ediciones Mundo Libro, resaltó las ventas de libros didácticos, mientras que Facundo Perea, de Octubre Libros (SFVC), valoró la cercanía del CATA: “Al estar en el centro, hubo más concurrencia. Vendimos bien, sobre todo novelas y libros de autoayuda”.
Innovación, inclusión y creatividad
El espacio también abrió lugar a proyectos inclusivos e innovadores. Caleido, emprendimiento de juegos didácticos para personas con discapacidad, superó ampliamente sus expectativas. “Nos dimos a conocer, el público respondió muy bien y las ventas fueron excelentes”, comentó su representante Alejandro Álvez.
Asimismo, Lucía Zaghis, creadora de Pumpeli, destacó el entusiasmo del público: “La gente se mostró muy interesada y volvió a comprar nuevos juegos, lo que demuestra el vínculo que se crea año a año”.
El público, por su parte, celebró la nueva edición. Yani, una visitante, destacó “la ubicación céntrica, el ambiente colorido y la organización impecable”, mientras que Cristina valoró “la puesta en valor de la Casa de Gobierno histórica y la realización de la feria en el centro, que facilita el acceso y promueve la lectura y la cultura catamarqueña”.
























