La palabra del monje Mamerto Menapace sobre la beatificación de Esquiú

La ceremonia se realizó en Piedra Blanca, donde nació y fue presidida por el cardenal Luis Héctor Villalba, arzobispo emérito de Tucumán en representación del Papa Francisco.

La palabra del monje Mamerto Menapace sobre la beatificación de Esquiú
Mamerto Menapace

Este sábado se llevó a cabo la beatificación de Fray Mamerto Esquiú en Catamarca, en la explanada de la iglesia de Piedra Blanca.

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La santa misa estuvo encabezada por la imagen de la Virgen del Valle que lució un manto especialmente bordado por devotos de la Virgen y de Fray Mamerto Esquiú en el que estaba estampado un mapa de Argentina donde sobresalían las provincias de Catamarca, donde nació Esquiú; Córdoba, donde fue Obispo Diocesano; el rostro del beato y tres flores como estrellas, que representan los votos que hizo como franciscano, que fueron pobreza, obediencia y castidad.

Frente a la iglesia, en la plaza principal de Piedras Blancas, se ubicaron en sillas los 1.200 invitados a la ceremonia, entre los cuales el secretario de Culto de la Nación, Guillermo Olivieri; el gobernador de Catamarca, Raúl Jalil; autoridades de distintas provincias y representantes eclesiásticos.

Previo a la ceremonia, el monje Mamerto Menapace le dedicó algunas palabras a Esquiú.

En su relato, cuenta una anécdota familiar que vivió cuando su padre estaba muy mal de salud. Relata que su familia fue a acompañarlo para despedirse, pero antes asistieron a una misa de Esquiú, que colocó un pañuelo con el nombre de su padre.

En ese punto, contó que el hombre pasó la noche mucho mejor de lo previsto y que al día siguiente los médicos veían posible una recuperación. Aunque aseguró que los días siguientes su padre se debatió entre la vida y la muerte, destacó que hubo una presencia que lo acompañó en ese proceso. Finalmente, el hombre sobrevivió y tuvo después ocho nuevos hijos, entre ellos al mismo Menapace.

La beatificación de Fray Mamerto Esquiú, decretado beato por el papa Francisco el 19 de junio de 2020, iba a realizarse el pasado 13 de marzo de 2021 en Catamarca, pero fue postergada por la situación sanitaria por la Covid-19 que vivía el país en ese momento, y las autoridades eclesiásticas decidieron realizarla este sábado bajo estrictos protocolos sanitarios.

El milagro que permitió Fray Mamerto Esquiú sea declarado beato por el papa ocurrió en la provincia de Tucumán, y fue por la inexplicable curación de una recién nacida con osteomilietis femoral grave.