Un verdadero conflicto se vive en el Partido Justicialista de La Falda. Ocurrió que la semana pasada, el diriginte Lucas Veliz, hombre del schiaretismo, fue designado como el nuevo presidente del partido en aquella localidad en el marco de una elección que desató una crisis interna.
En principio, desde el sector que responde al kirchenirismo, y al que pertenece Maldonado, se negaron al dar el quórum para sesionar aunque el plazo estaba vencido y el dirigente estaba presidiendo fuera de término. En este sentido, frente a la imposibilidad de obtener la convocatoria necesaria para llevar adelante la votación, los miembros del partido recurrieron al art. 20 de la Carta Orgánica del PJ y se convocó a una nueva sesión para una hora después el mismo día, donde Véliz resultó electo.
Ahora, el presidente que debería dejar el cargo se niega a hacerlo aduciendo que la elección fue irregular y junto al sector que responde a Caserio piden que se impugne la elección.