Según datos proporcionados por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), durante los primeros diez meses del año se colocaron en el mercado interno cerca de 105.000 toneladas de peras, es decir, un 10% más que en el mismo período del año anterior. y un récord de ventas durante las últimas dos décadas.
Hace diez años, solo el 15% de la pera recolectada se orientaba al mercado nacional. Esta temporada este indicador llegará al 19%. El volumen de peras destinadas a la industria también ha aumentado en la última década entre un 3% y un 29%. Mientras tanto, la fruta destinada a la exportación ha disminuido un 8% en ese período.
Evolución positiva de los precios
Se observa una tendencia positiva al analizar la evolución de los precios en moneda local. Durante el mes de octubre del año pasado, las peras tuvieron un precio mayorista promedio cercano a los 30 pesos el kilo en el Mercado Central de Buenos Aires (MCBA). Durante el mismo período en 2020, ese valor se duplicó a poco más de 60 pesos por kilo.
La mejora también se aprecia en dólares: en octubre de 2019 el valor medio de la pera -en el mercado mayorista- se situó en 0,52 dólares el kilo; en el mismo mes de este año, estuvo algo más de 0,80 dólares el kilo.
Según estimaciones privadas, se colocarán 120.000 toneladas en el mercado nacional en todo 2020.
Manteniendo la demanda
En la actualidad, el consumo per cápita de peras en Argentina se sitúa en torno a los 2,5 kilos anuales. Este indicador está muy por debajo de los 3,7 kilos de consumo per cápita de la Unión Europea, los 5,2 kilos consumidos en Turquía o los 10,4 kilos de consumo per cápita en China.
Igualmente se han abastecido los mercados de exportación habituales con buenos logros sumando al mercado nacional como herramienta en la economía de base de los productores de peras.