Durante la madrugada del día sábado hubo descontrol en la Costanera, en el fin de semana “extra largo”. Muchos jóvenes que se autoconvocaron por redes sociales participaron de una fiesta en la que se consumió alcohol y no se respetaron medidas de prevención de contagios ni el distanciamiento social y el uso de tapabocas. Se escaparon a las 7 de la mañana ante la llegada de efectivos de la Policía de la Ciudad y dejaron en el lugar una gran cantidad de basura y botellas vacías.
Los agentes no hicieron un operativo cerrojo en el lugar ni tampoco test de alcoholemia a los conductores de los vehículos. En el lugar había camionetas con las puertas abiertas en las que se vendían bebidas alcohólicas y los vendedores de la zona aseguran que todos los fines de semana hay este tipo de celebraciones, durante la cuarentena.
El jefe de Gabinete porteño Felipe Miguel afirmó en diálogo con “Arriba Argentinos” que realizan controles y destacó la presencia de la Policía en el lugar pese a que llegó mucho más tarde de iniciada la fiesta, que habría empezado a las cuatro de la madrugada. Aclaró que aunque la celebración fue al aire libre y que eso reduce el riesgo de transmisión de COVID-19 todavía “no están habilitadas las fiestas masivas”.
El funcionario afirmó que “es muy importante que la gente entienda que no se superó la pandemia” y que “los riesgos de contagio siguen presentes y dependen del comportamiento” de las personas. Señaló que hay mucha gente que hizo un esfuerzo muy grande para evitar contagiarse aunque reconoció que “hay excepciones”, como el caso de los jóvenes que participaron de la fiesta en la Costanera.
Pero no es la única contravención durante la cuarentena, ya que a fines de noviembre un grupo de jóvenes participó de una celebración clandestina en Monte Caseros, Corrientes.
En los videos que se viralizaron en las redes sociales Twitter y Facebook se ve gran cantidad de jóvenes que consumen tragos con música de fondo y a la orilla del río, sin cumplir ninguna medida de prevención de contagios de COVID-19. Ni la Policía ni el personal de la Municipalidad intervinieron para dispersar a los cientos de participantes presentes en el evento, según informa “El Litoral”.