La hipótesis de que se trató de un ataque por encargo, a manos de sicarios, es la que pisa más fuerte en la investigación por lo ocurrido a un abogado de 72 años el martes en Belgrano, que fue abordado por un hombre en moto que le disparó en el rostro.
Roberto Daniel Martínez fue baleado cuando ingresaba en auto a su casa de Arribeños al 1400, en Belgrano, alrededor de las 16. Un hombre en moto se acercó a la ventanilla del coche y le disparó. El tiro, que pudo ser fatal, le atravesó la mejilla.
Lo que más extrañó a la policía es que no se tratara de un robo, por eso comenzaron a manejar la hipótesis de un móvil de índole personal, o un ajuste de cuentas.
Mientras, Martínez se recupera en el Hospital Pirovano, adonde llegó trasladado por el SAME poco después del ataque: “La bala ingresó por una mejilla y salió por la otra”, dijeron las fuentes.
Personal de la Comisaría Vecinal 13A de la Policía de la Ciudad busca registros del hecho en las cámaras de seguridad, y hay un testigo presencial del ataque. Con todo, los investigadores “se inclinan a pensar que fue por motivos personales”.
Martínez fue, según consta en su curriculum, apoderado general de la Unión Ferroviaria de 1974 a 2007 y jefe de gabinete de asesores del Instituto Provincial de Lotería y Casinos bonaerense de 2007 a 2009. El abogado viajaba con un revólver calibre 38 en su auto al momento del ataque, que no llegó a utilizar.
“Tuvo orificio de entrada en el maxilar superior y herida en la fosa nasal, por suerte está fuera de peligro. Quedó alojado en el sector cirugía maxilofacial, se le hizo una tomografía computada y hay que ver que grado de compromiso tiene esa herida”, dijo a Télam Alberto Crescenti, titular del SAME.
Martínez fue abogado defensor del interventor del Instituto Lotería y Casinos de la Provincia de Buenos Aires, Luis Alberto Peluso, en 2008, durante el gobierno de Daniel Scioli. Entonces lo imputaron en una causa penal por “abuso de autoridad, incumplimiento de los deberes de funcionario público, negociaciones incompatibles con la función pública, exacciones ilegales y presumible cohecho”.
El hecho es investigado por la Fiscalía Nacional en lo Criminal y Correccional 52, a cargo de Romina Monteleone, ante la Secretaría Única de Valeria Sánchez Negrette, en una causa caratulada como “tentativa de homicidio”.
