La durísima pelea entre los gremios docentes y la gestión de María Eugenia Vidal por los salarios parece dirigirse a un cierre del año sin solución, y en 2019 podrían seguir las huelgas.
Los maestros que trabajan en escuelas públicas y en algunas subvencionadas por el Estado llevaban adelante este martes la jornada de paro número 25 en lo que va del año, en reclamo de una mejora salarial que al menos empate la inflación.
Al paro de este martes se le sumará una jornada de protesta con acciones distritales y un "banderazo" mañana, por lo que tampoco habrá clases en las escuelas al menos durante el turno mañana.
La gestión Vidal le pide al Frente de Unidad Docente Bonaerense que acepte un incremento nominal del 30% y promete seguir negociando en diciembre, pero los líderes sindicales y sus bases no confían en que luego habrá avances.
En el Gobierno bonaerense explican que no quieren comprometerse a pagar un salario para el cual no están asegurados los recursos. Y descartan de plano emitir deuda en el exterior para acceder a liquidez.
El FUDB no quiere firmar la paritaria del 30% que propone la gestión Cambiemos porque todas las proyecciones de inflación dan cuenta que los precios subirán este año por encima del 45%.
"No vamos a firmar una pauta salarial a la baja, de ninguna manera. Si este año termina de esta manera, el año que viene va a continuar de esta manera", dijo este martes Roberto Baradel, líder del sindicato Suteba.
Gabriel Sánchez Zinny, director general de Cultura y Educación bonaerense, salió a contestarle al sostener que "las paritarias están abiertas", por lo que "dejar a los chicos sin clases no es la forma de seguir conversando".
En declaraciones a la prensa, el funcionario criticó la postura del Frente de Unidad Docente Bonaerense porque no acepta el 30% de aumento salarial propuesto para luego "continuar con las negociaciones en diciembre".
"Propusimos en la ultima reunión con los gremios el aumento que pagamos y reunirnos en diciembre. Los gremios lo rechazaron. Muchos de los paros no tuvieron que ver con la situación docente. Excede el tema educativo y tiene un color político", dijo.
Pero para Baradel –un dirigente de conocida militancia en las filas del kirchnerismo- la única traba para ponerse de acuerdo es la pérdida del poder adquisitivo de los salarios de los maestros.
El sindicalista señaló que firmar la paritaria que propone la gestión Vidal le haría perder entre 15 y 20 puntos al poder adquisitivo de los trabajadores de la educación en la provincia de Buenos Aires.
En paralelo, consideró que Vidal “aumenta impuestos, autoriza aumentos de tarifas y no permite que se actualicen los salarios. Le reclama al Gobierno Nacional que se actualice el Fondo del Conurbano por inflación, y es lo mismo que piden los maestros para sus sueldos”.