Argentina sigue experimentando el alza más importante de los casos de COVID-19 desde el inicio de la pandemia, que ya superan los 153.000, y ante esta realidad varios cementerios porteños preparan secciones especiales para los fallecidos por esta enfermedad.
Con 5.439 nuevos casos reportados el sábado y 40 fallecidos, que suman un total de 2847 desde el comienzo de la pandemia, Argentina reportó esta semana la mayor cantidad de contagios y fallecimientos desde que se decretara la cuarentena el pasado 20 de marzo. Esto sucede en la misma semana que el gobierno de Alberto Fernández comenzó a relajar las medidas y permitió la reapertura de ciertas actividades económicas, afectadas por la difícil situación económica del país.
Mientras tanto, al menos en dos de los tres cementerios de la Ciudad, tales como los de Chacarita y Flores, se preparan cientos de fosas adicionales en secciones especiales para los fallecidos por esta enfermedad, siguiendo estrictos protocolos de seguridad para aislarlos de personas que murieron por otras causas.
También se establecen horarios especiales para llevar al cementerio a los muertos por coronavirus, que son trasladados directamente desde el hospital y recibidos por personal con equipo y vestimenta de protección personal.
Las autoridades insisten en que no se han registrado más muertos que otros años por estas fechas, dato que es confirmado por los dueños de funerarias de los alrededores. La cantidad de decesos es la "estacional'' de uno de los meses de más trabajo al año, confirmó a The Associated Press Jorge Martino, dueño de la Funeraria Zuppi.