Las manifestaciones se desarrollaron de forma pacífica en todo el país, excepto en el Obelisco porteño. Allí los manifestantes rompieron un camión de exteriores del canal de televisión C5N y lo obligaron a retirarse. Periodistas de otros canales de TV tuvieron que ayudar a los trabajadores de prensa del canal agredido para que pudieran retirarse.
Según pudo observarse, el camión de exteriores sufrió la rotura de un vidrio. Este canal es propiedad de los empresarios Cristóbal López y Fabián de Sousa y su línea editorial es muy cercana al Gobierno. Los manifestantes que agredieron a los periodistas expresaron que lo hacían porque sintieron una "provocación" la presencia del camión rojo allí.
En la manifestación en la Capital Federal también hubo fuertes críticas contra el proceso de Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO) que acordaron el Gobierno nacional y las administraciones porteña, de Horacio Rodríguez Larreta, y bonaerense, de Axel Kicillof, para contener el avance del Covid-19 en el Área Metropolitana de Buenos Aires.
Justamente, para manifestarse contra el Gobierno nacional miles de personas violaron la cuarentena y se acercaron al Obelisco. Se los podía ver con barbijos y máscaras faciales. Pero en un momento la situación se descontroló, hubo momentos de mucha tensión, y el distanciamiento social se suprimió. No hubo agentes de la Policía en el lugar.
Por la Corresponsalía en Buenos Aires