La diócesis de San Francisco informó que recibió cinco solicitudes de personas bautizadas que buscan renunciar al sacramento de la Iglesia Católica.
Este procedimiento, conocido como "apostasía", es lo que plantea la Coalición Argentina para un Estado Laico, que durante el 8 de agosto, día del debate en el Senado, instaló carpas en la plaza del Congreso, en apoyo a la despenalización del aborto.
El vicario general de la diócesis de San Francisco, Gustavo Zaninetti, reconoció que desde hace seis o siete años ha surgido este movimiento donde algunos bautizados católicos no se sienten identificados con la Iglesia y piden realizar el trámite.
Zaninetti explicó que más allá de este pedido, que todo bautizado puede realizar, "no podemos anular el bautismo porque según la fe de la Iglesia Católica es un sacramento que dura para toda la vida, no se puede quitar".
Y agregó que aceptan que las personas quieran renunciar a la Iglesia Católica y dejan constancia de eso en el acta de bautismo, pero no se puede anular y tampoco destruir un documento oficial como el acta de bautismo.