El Canal de Suez, que conecta al mar Mediterráneo y al mar Rojo, es uno de los más activos del mundo. Por tal motivo, preocupa el inconveniente originado este martes, luego de que los fuertes vientos y una tormenta de arena llevaran al Evergreen a una posición horizontal, provocando el encallamiento de la embarcación.
El inmenso portacontenedores fue construido en 2018, mide 400 metros de eslora y una capacidad de almacenamiento de 224.000 toneladas y 59 metros de ancho. El atasco sucedió cuando intentaba llega a Rotterdam, Holanda, proveniente de China.
El paso se encuentra cerrado y las embarcaciones –según la agencia Bloomberg, más de 100 - se van acumulando, de un lado y de otro, dando lugar a un embotellamiento marítimo pocas veces visto.
El Canal de Suez está trabajando para remolcar el barco y desatascarlo. Otra opción, según los especialistas es realizar un dragado que permite removerlo. Mientras tanto, la administración está reabriendo viejas secciones del canal con el objetivo de aliviar el cuello de botella. La situación ya lleva más de 24 horas y se espera que se mantenga así varios días más.
Por ese paso, circula cerca de un 10% del comercio mundial, tanto bienes de consumo como barriles de crudo. De hecho, uno de los efectos colaterales que tendría este episodio se relaciona con el suministro de petróleo, especialmente de las refinerías de Estados Unidos y Europa, que dependen de los cargamentos provenientes de Medio Oriente. Además, se verá retenido el petróleo del Mar del Norte que va rumbo a Asia.