Todo aquel que quiera aprender sobre la historia de la realeza y la política del Reino Unido tiene que ver The Crown. La serie es un éxito mundial, está en boca de todos y se dice que con solo verla “ni hace falta estudiar historia”. Sin embargo, no todo es tan real como parece. El gobierno británico habló y le pedirá a Netflix que aclare que se trata de una ficción.
“Temo que una generación de espectadores que no vivió estos eventos pueda confundir la ficción con los hechos”, señaló el secretario de Cultura del Reino Unido, Oliver Dowden. A través de la prensa pidió a los productores de la serie que dentro de la plataforma, en el texto donde se explica la trama, aclaren que se trata de una ficción dado que nuevas generaciones están viéndola y varios dicen que prefieren aprender historia de este modo, en lugar de leer libros.
Según resaltó el sitio especializado The Hollywood reporter, Dowden también afirmó que esta semana se contactará con Netflix para expresar su preocupación. The Crown se lanzó por primera vez en 2016 y si bien sus dramáticas interpretaciones suscitaron críticas, la última temporada provocó mayor cantidad de reacciones, principalmente porque alcanzó una de las partes más pertinentes de la historia: el desglose del matrimonio del príncipe Carlos y la princesa Diana.
La última temporada (cuarta) se estrenó el 15 de noviembre y fue la más esperada, ya que cuenta con los personajes más emblemáticos del siglo XX, como Lady Di y Margaret Tatcher, interpretadas por las actrices Emma Corrin (“Pennyworth”, “Misbehaviour”) y Gillian Anderson (“The X-Files”, “Sex Education”), respectivamente.
Ambas se unen al reparto de actores que repetirá en esta nueva entrega, como Olivia Colman, que interpreta a la Reina Isabel II; Josh O’Connor, como el Príncipe Carlos; Erin Doherty, como la Princesa Ana; Marion Bailey, como la Reina Madre; o Emerald Fennell, como Camilla Parker Bowles, entre otros.