En medio de las movilizaciones en repudio al escándalo por la vacunación vip, poco antes de las 17 horas comenzó la concentración de manifestantes frente a la Quinta presidencial de Olivos, uno de los sitios donde se esperaba a buena parte de la convocatoria impulsada en las redes sociales bajo el hashtag #27F y respaldada por dirigentes de la oposición.
Minutos después, el lugar se convirtió en un escenario de tensión: llegaron militantes para apoyar a Alberto Fernández y se produjeron incidentes con quienes protestaban contra el Gobierno. Los integrantes de distintas organizaciones sociales y agrupaciones sindicales vinculadas con el oficialismo se presentaron espontáneamente en las puertas de la residencia presidencial.
Según las imágenes que trascendieron a través de las redes sociales, los gremialistas llegaron con remeras de diferentes sindicatos y se pararon frente a los ingresos donde los vecinos estaban protestando.
En ese contexto, hubo algunos forcejeos, empujones y hasta trompadas. La Policía tuvo que montar un cordón para separar a los manifestantes y tratar de evitar incidentes mayores. La calma duró por momentos. Mientras un grupo con banderas argentinas cantaba el himno, otros recitaban la Marcha Peronista.
En el centro porteño y en distintos puntos del país se llevan adelante distintas movilizaciones contra el esquema de vacunaciones. El epicentro de la marcha es la Plaza de Mayo de la Ciudad de Buenos Aires, a diferencia de las últimas que se realizaron contra el Gobierno, en las que el principal foco de concentración fue el Obelisco.
Para contrarrestar esta iniciativa, movimientos sociales afines al oficialismo y sindicatos de la CGT, con apoyo de la CTA, convocaron a una movilización para el próximo lunes en el Congreso de la Nación para transmitirle su apoyo al presidente Alberto Fernández en la apertura de sesiones ordinarias.
El jefe de Estado agradeció el respaldo pero pidió que se evite una movilización presencial fuera del Palacio Legislativo. “Les pido que sigamos dando el ejemplo y que esta vez cada uno siga mi mensaje en forma remota. Desde sus casas o desde sus lugares de trabajo”, solicitó. “La pandemia aún nos ataca. Nosotros cuidemos al prójimo aunque otros no lo hagan”, aseguró.