Día del Pediatra: qué secuelas padecen los niños por la pandemia de Coronavirus

El COVID-19 no solo afectó a los adultos, sino que también lo sufrieron los niños que si bien muchos no sufrieron la enfermedad, fueron víctimas de otras secuelas. Vía País habló con tres médicos pediatras sobre las secuelas físicas y mentales que generó la pandemia en sus pacientes.

Día del Pediatra: qué secuelas padecen los niños por la pandemia de Coronavirus
Vacunación contra el coronavirus en Santa Fe.

Este miércoles 20 de octubre se celebra un nuevo Día del Pediatra, y es una buena ocasión para centrarse en las secuelas que los más chicos padecen por la pandemia de Coronavirus.

El COVID-19 hizo estragos en todo el mundo y más allá de que la enfermedad tuvo impacto en la economía mundial, que llevó a los países a una caída estrepitosa de su PBI, y las distintas realidades sociales, la salud de los niños también se vio afectada.

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El contexto de aislamientos en todos los países del planeta hizo que en las personas florezcan problemas en su salud mental y física. Así como también causó más problemas en sus patologías previas, a las personas que las tenían, el no atenderse y realizarse los estudios correspondientes.

 Vacunación en menores. foto Javier Ferreyra
Vacunación en menores. foto Javier Ferreyra

Durante la pandemia, que no terminó, los adultos no fueron los más afectados, sino que el impacto más fuerte se dio en los niños. Si bien en la mayoría de los países del mundo las restricciones ya se flexibilizaron y poco a poco el impacto “más fuerte” del Coronavirus queda atrás, el contexto de aislamiento y el temor generalizado les dejó muchas secuelas.

El coronavirus dejó secuelas físicas y mentales en los mas chicos

Hay varias secuelas que los pediatras ya ven en sus consultorios, como las dolencias físicas que son dolores de cabeza y de panza, pero la mayor parte de las secuelas se dieron en la salud mental de los niños y niñas. La ansiedad, el ataque de pánico y el temor a enfermarse fueron los problemas que más surgieron, así como también, según le cuenta a Vía País la pediatra María Isabel Ansaldi, ocurre que no quieren sacarse el barbijo para nada y no para de lavarse las manos.

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En diálogo con Vía País, el vicepresidente de la Sociedad Latinoamericana Infectología Pediátrica, Roberto Debbag, cuenta que la pandemia afectó a los niños desde el punto de vista emocional en una forma muy importante. “Hay diferentes estudios realizados inclusive por Unicef y por la Sociedad Argentina de Pediatría que demuestran que la cuarentena prolongada no solo produjo efectos cognitivos, sino que también produjo efectos en la salud emocional como depresión, irritabilidad y falta de sueño”, explica Debbag, quien agrega que no solo en la Argentina, sino que en el mundo, “la pandemia impactó de sobremanera en los chicos”.

“Chicos que controlaban esfínteres dejaron de controlarlos o niños que tenían cuestiones emocionales se vieron más afectados. Se incrementó la condición de la enfermedad que tenían previamente, afirma el infectólogo especializado en pediatría.

El presidente de la Sociedad Argentina de Pediatría, Omar Tabacco, le cuenta a Vía País que la pandemia del Covid-19 ha afectado “notablemente a la pediatría” y no solamente por la potencialidad de enfermarse por el Coronavirus, en donde, afortunadamente, “no es tan agresivo en general en la pediatría y en la adolescencia como en los adultos”; pero aún así “hay chicos que la han pasado muy mal”.

“En los chicos con comorbilidades, el riesgo de hacer una forma grave (de Coronavirus) aumenta entre 5 y 6 veces el riesgo”, dice Tabacco.

El aislamiento trajo trastornos emocionales en los niños

En declaraciones a este medio, Omar Tabacco confiesa que más allá del Covid-19 se han desarrollado un montón de otros problemas que fueron producto del aislamiento y del encierro prolongado y esto se puede marcar en trastornos emocionales y en trastornos físicos”.

En cuanto a los trastornos emocionales “se generaron percepciones y sentimientos negativos, como angustia, ansiedad, miedo y depresión”.

La pandemia acrecentó los problemas de sobrepeso y obesidad en los niños.
La pandemia acrecentó los problemas de sobrepeso y obesidad en los niños.

Sentimientos muy negativos que se expresan por trastornos de conducta o bien por lo que llamamos trastornos funcionales, es decir, síntomas que se originan en órganos sanos a partir de los problemas emocionales, los problemas psicofísicos que se producen en los chicos, como por ejemplo: el dolor toráxico, la cefalea, los trastornos del sueño, el dolor abdominal recurrente, la dispepsia (indigestión) y el destino irritable. Esto ha aumentado notablemente en la pandemia”, confiesa el titular de la Sociedad Argentina de Pediatría.

Por otro lado, Tabbaco añade que los problemas propios del aislamiento como comer mal y moverse poco generaron un aumento considerable de sobrepeso y obesidad. “Lo estamos viendo ahora en los consultorios, cuando en realidad ya era un problema serio en nuestra población infantil”, asevera Tabacco.

La pandemia profundizó los problemas nutricionales en lo niños

Tabbaco le cuenta a Vía País que surgieron otros problemas nutricionales producto, sobre todo, de los trastornos emocionales en la adolescencia como los trastornos de la conducta alimentaria: la anorexia y la bulimia.

Tabbaco advierte también sobre las secuelas educativas que dejará la pandemia. (AP)
Tabbaco advierte también sobre las secuelas educativas que dejará la pandemia. (AP)

“Los pediatras ya estamos preparados y comprometidos con otra secuela que ya estamos viendo y va a dejar esta pandemia, producto de los problemas económicos y sociales que sabemos que impactan en los más vulnerables, que son los chicos: la desnutrición aguda o crónica y también todas las consecuencias propias de la pobreza”, argumenta Tabbaco.

“El espectro de complicaciones para la pediatría es muy amplio y sabemos que en los próximos años vamos a tener que trabajar mucho en la interdisciplina, mucho con nuestras familias y mucho, fundamentalmente, en el aspecto social para poder volver a una infancia más normal. A una infancia en donde los chicos puedan disfrutar plenamente de todos sus derechos”, finaliza el pediatra, quien tampoco quiere dejar de hacer notar los problemas educativos que la pandemia dejará.

Por qué se celebra el Día del Pediatra cada 20 de octubre

La pediatría es una de las especialidades médicas más importantes para la sociedad ya que atiende a niños y niñas y tiene su fecha de celebración el 20 de octubre de cada año.

La fecha se instauró durante el Congreso Mundial de Pediatría que se realizó en nuestro país en 1973, en conmemoración a la fundación de la Sociedad Argentina de Pediatría (SAP), que fue el 20 de octubre de 1911.

El pediatra es quien trata a los niños desde su nacimiento hasta la adolescencia, en la que se distinguen cinco períodos:

  1. Recién nacido (hasta las 4 semanas),
  2. Lactante (1 hasta 12 meses de vida),
  3. Preescolar (1 a 6 años),
  4. Escolar (6 a 12 años),
  5. Adolescente (12 a 18 años).