Mauricio Macri puso fin, a través del decreto 153/2017, al proyecto que Cristina Kirchner había anunciado en 2012 sobre la Isla Demarchi. De este modo, dejó atrás la construcción del Polo Audiovisual para darle paso al desarrollo de actividad inmobiliaria y la construcción de obras nuevas y/o remodelaciones en la zona.
Más allá de las intenciones, el gobierno nacional deberá resolver un problema con el que ya se enfrentó Cristina Kirchner: la isla no está deshabitada. Allí funcionan numerosas instituciones vinculadas a la actividad marítima, como el Observatorio Naval, la compañía Tandanor, los talleres de Prefectura y la Armada, la Dirección de Construcciones Portuarias y Vías Navegables, y la Escuela Naval Fluvial.
"No nos podemos enterar por los diarios de este tipo de medidas, porque sino tengo que pensar que este Gobierno quiere llevar un negociado por detrás igual que la administración anterior", protestó Schmid, representante gremial del sector.
El Observatorio de Derecho de la Ciudad, una ONG que ya había cuestionado a Cristina Kirchner por el Polo Audiovisual, anunció que presentará una denuncia penal contra el presidente Macri por avanzar en la cesión de los predios sin contar con la autorización del Congreso nacional, el único organismo "con competencia para vender y disponer de tierras nacionales".