El argentino Lionel Messi, que el sábado marcó dos golazos en la victoria del Barcelona ante Espanyol, es uno de los invitados de lujo en la superfinal de la Copa Libertadores entre River y Boca.
La Pulga tenía reservado un lugar en el Santiago Bernabéu, donde presencia este partido histórico. Sergio Busquets, Jordi Alba y Gerard Piqué también dijeron presente en las tribunas del estadio del Real Madrid.