Como indica la tradición católica, Moorea, la hija de Floppy Tesouro y Rodrigo Fernández Prieto, fue bautizada. La ceremonia fue en la Parroquia Nuestra Señora de la Esperanza, en Puerto Madero. Pero hubo un dato que llamó la atención: su papá no fue.
En las imágenes que compartió no se lo ve y pronto comenzó a especularse con una crisis de la pareja. Sin embargo, la modelo salió a explicar la razón de su ausencia: "Rodri no es creyente y prefirió no ir a la Iglesia", explicó a la periodista Laura Ubfal.
Algo así ya había pasado cuando se casaron, en diciembre de 2016. Él no quiso ir a una Iglesia, así que se casaron simbólicamente en una playa de Punta del Este, sin la presencia de un sacerdote.